Retrocediendo en el tiempo vamos hoy con una crónica del brevets de 600kms del año 2007, realizada por Jose Maria Campos organizador de la Madrid-Gijón-Madrid , vaya tute nos pegamos el, Castor y yo, treintaytantas horas de bici, eso sí, en perfecta armonia, desde los relevos hasta los canticos para no quedarnos dormidos por la noche:
CRONICA BREVET DE 600 SEVILLA
By José María Campos
A las cinco de la mañana del día 2 de Junio, tenía prevista el bueno de Forever (José María), la salida para este brevet de 600 en Sevilla.
Llegada al punto de control a las 4,40 am. Al rato llega José María con su flamante bici “electrica” (Que jodio).Pronto aparecen Pedro de Ubrique y Castor, que al fín y a la postre, serían mis dos unicos compañeros de viaje. En ese instante no pude dejar de dedicar un grato recuerdo para Cristobal, que seguro nos “acompañaría” desde el cielo en esta que debería haber sido tambien su ilusión y su aventura (q.e.p.d) y otro para Miguel Angel Chica al que deseo una pronta recuperación y decirles a ambos desde estas lineas que se les ha echado mucho de menos.
Cumplimentación de carnets de ruta y un rato de espera para el portugues Paolo que había anunciado su participación, pero dada su tardanza decidimos tomar la salida.
La noche sevillana invitaba a rodar tranquilos y disfruntando al máximo de estos primeros compases con un ritmo vivo, pero a la vez contenido, dado que nuestra pretensión es hacer la brevet de “un tiron”.
El aire en contra va enturbiando, poco a poco, la ilusión inicial porque a Cordoba quedan 146 kmts. y no existen visos de cambio.
Los relevos, uno cada dos kmts funciona perfectamente y esto hace que la marcheta sea mas llevadera, y así vamos haciendo camino y viendo un precioso amanecer. Una corta parada para desayunar y, por fin la anhelada Córdoba.
Córdoba nos recibión con muchisimo calor y teniamos el problema de que para enlazar con nuestra ruta debiamos cruzar toda la ciudad, en sabado y la hora mas complicada. Pedro era el que se había encargado de la logistica en este punto, pero no las tenía todas consigo. Pero, ¡oh diosa fortuna! Parados en un semaforo se nos pone a nuestra altura un joven con su bici de paseo dispuesto a hacernos una salida estilo formula 1. Dirijo una mirada a Pedro y acto seguido la pregunta de rigor: ¿ Nos podrías indicar que dirección debemos seguir para coger la carretera de Badajoz?, dado lo lioso de la respuesta, probamos suerte de nuevo: ¿nos podrías acompañar y nosotros te seguimos?. La respuesta fue firme y contundente: ¡seguidme!…….si podeis. ¡ Que jodio! Empezó a dar pedales como un poseso y Pedro tuvo que ponerse a su altura y darle conversación para que la travesia fuera lo mas tranquila posible.
El calor arreciaba con ganas. Subidas y mas subidas hasta Espiel donde paramos a comer. A destacar en este tramo el incidente con un turismo que nos adelanta con los bajos en llamas. Impotentes porque no podiamos avisarles, vemos como a unos 200 metros se paran en el arcen y salen disparadas dos mujeres. Hacemos señas para que se separen del coche y se coloquen al otro lado de la carretera por si explosionaba. Afortunadamente bajaba un coche de policia y pudieron auxiliarlas. Proseguimos nuestro camino y decidimos parar a comer en Espiel.
Salida tranquila para favorecer la digestión, el calor seguia apretando con ganas, pero el aire ya no nos castigaba tanto. Quedaban unos 170 kmts para Zafra por una carretera plagada de toboganes y en la que la unica distracción eran los relevos que seguiamos haciendo y la pesadez de ir descontando, kilometro a kilometro, lo que nos faltaba (Badajoz 225 kmts.) Pedro comenta: Que ganas tengo de que se cambien el dos por uno.Seguimos con la monotonía y marcandonos metas cortas para hidratarnos. (Badajoz 175 kmts.) Nuevamente Pedro: Que ganas de ver los dos digitos. Por fín Zafra, refrigerio y camino de Santa Olalla de Cala, pero antes cena en Fuente de Cantos, coincidiendo con la anochecida.
La noche se presentaba muy guapa. Temperatura agradable. La luna nos empezaba a saludar con todo su esplendor, aro enorme y anaranjado que emergia en el horizonte abriendose paso hasta colocarse exactamente sobre nuestra vertical, alumbrandonos con su manto y
recordandonos continuamente que no estabamos solos, que ella nos iba a acompañar y proteger durante toda la travesía nocturna.
Pedro era el que mas conocía la ruta, por haberla realizado con anterioridad y nos habia anticipado que hasta Santa Olalla primaba lo favorable (Nos pudimos dar cuenta de la dureza del 300 y el 400 de Sevilla, que se realiza por este recorrido pero a la inversa). Cartel de Sevilla 125 kmts y TODO BAJADA. Pero no, esa no era nuestra ruta, nosotros en Santa Olalla (Kmt 400) debiamos girar a la derecha en dirección Zufre, Rio Tinto, Zalamea la Real. Tramo de 61 kmts. que, según Pedro, tenía dos subiditas fuertes y el resto llaneando.
¡ Vaya encerrona! Subidas y mas subidas con tramos de hasta el 12% y 13%, según el altimetro de Castor. Los puntos kilometricos no se movian. En un tramo de 7 kmts tardamos casi una hora. Como siempre ibamos picando hacia arriba logicamente nuestro punto de referencia eran las estrellas y nuestra generosa compañera, la luna, y, estando en estas, observamos los faros de un coche…yo diría que en cielo. La pregunta era obligada: Pedro, ¿ Hasta allí tenemos que subir?, Respuesta lacónica: Si.
A esta alturas todos nuestros pensamientos coincidieron en dar un “cariñoso” recuerdo a nuestro querido Forever: Estimado amigo y te lo digo con todo el cariño que sabes que te tengo: ¿Qué necesidad había de poner este tramo de 61 kmts en un brevet de 600?, ¡sobretodo cuando ya llevabamos 400 kmts en las piernas!.
Fue este un tramo de 61 kmts., bajo mi punto de vista, totalmente innecesario en un recorrido de 600 kmts.. Nos dejó los cuerpos realmente castigados
A la cabeza se me vinieron todos estos organizadores de brevets, que las programan con una dureza impropia de este tipo de marchas (quiero recordar en este punto lo que me enseñaron aquellos pioneros del cicloturismo en España y que realmente fue lo que me “enganchó” a este mundillo: “Las brevets consisten en hacer kilometros y kilometros, si es posible con un buen grupo de amigos, aprovechando para conocer regiones, pueblos y pobladores y a la vez practicar tu deporte favorito”)..
Retomando el relato, llegamos a Trigueros amaneciendo, ayudamos al empleado de la gasolinera donde teniamos que sellar a abrirla y nos pusimos a degustar lo poco que nos ofrecía: vaso de chocolate o café con galletitas del principe de bekelar. Cuando nos quitamos las gafas y los cascos, el espectaculo fue desastroso: Miradas perdidas mientras degustabamos los manjares, ojos hundidos, caras de pocos amigos….etc. ¡ Y pensar que 100 kmts antes estabamos de p…madre!. ¡Dichoso e inesperado tramo!.
Nos pusimos nuevamente en camino, ya solo faltaban unos 90 kmts., pero eso sí con el aire en contra nuevamente. El sol con su calorcito, la proximidad a meta, el bocadillo en La palma del Condado, nos fueron devolviendo el buen animo y finalmente concluir con éxito la prueba.
CRONICA BREVET DE 600 SEVILLA
By José María Campos
A las cinco de la mañana del día 2 de Junio, tenía prevista el bueno de Forever (José María), la salida para este brevet de 600 en Sevilla.
Llegada al punto de control a las 4,40 am. Al rato llega José María con su flamante bici “electrica” (Que jodio).Pronto aparecen Pedro de Ubrique y Castor, que al fín y a la postre, serían mis dos unicos compañeros de viaje. En ese instante no pude dejar de dedicar un grato recuerdo para Cristobal, que seguro nos “acompañaría” desde el cielo en esta que debería haber sido tambien su ilusión y su aventura (q.e.p.d) y otro para Miguel Angel Chica al que deseo una pronta recuperación y decirles a ambos desde estas lineas que se les ha echado mucho de menos.
Cumplimentación de carnets de ruta y un rato de espera para el portugues Paolo que había anunciado su participación, pero dada su tardanza decidimos tomar la salida.
La noche sevillana invitaba a rodar tranquilos y disfruntando al máximo de estos primeros compases con un ritmo vivo, pero a la vez contenido, dado que nuestra pretensión es hacer la brevet de “un tiron”.
El aire en contra va enturbiando, poco a poco, la ilusión inicial porque a Cordoba quedan 146 kmts. y no existen visos de cambio.
Los relevos, uno cada dos kmts funciona perfectamente y esto hace que la marcheta sea mas llevadera, y así vamos haciendo camino y viendo un precioso amanecer. Una corta parada para desayunar y, por fin la anhelada Córdoba.
Córdoba nos recibión con muchisimo calor y teniamos el problema de que para enlazar con nuestra ruta debiamos cruzar toda la ciudad, en sabado y la hora mas complicada. Pedro era el que se había encargado de la logistica en este punto, pero no las tenía todas consigo. Pero, ¡oh diosa fortuna! Parados en un semaforo se nos pone a nuestra altura un joven con su bici de paseo dispuesto a hacernos una salida estilo formula 1. Dirijo una mirada a Pedro y acto seguido la pregunta de rigor: ¿ Nos podrías indicar que dirección debemos seguir para coger la carretera de Badajoz?, dado lo lioso de la respuesta, probamos suerte de nuevo: ¿nos podrías acompañar y nosotros te seguimos?. La respuesta fue firme y contundente: ¡seguidme!…….si podeis. ¡ Que jodio! Empezó a dar pedales como un poseso y Pedro tuvo que ponerse a su altura y darle conversación para que la travesia fuera lo mas tranquila posible.
El calor arreciaba con ganas. Subidas y mas subidas hasta Espiel donde paramos a comer. A destacar en este tramo el incidente con un turismo que nos adelanta con los bajos en llamas. Impotentes porque no podiamos avisarles, vemos como a unos 200 metros se paran en el arcen y salen disparadas dos mujeres. Hacemos señas para que se separen del coche y se coloquen al otro lado de la carretera por si explosionaba. Afortunadamente bajaba un coche de policia y pudieron auxiliarlas. Proseguimos nuestro camino y decidimos parar a comer en Espiel.
Salida tranquila para favorecer la digestión, el calor seguia apretando con ganas, pero el aire ya no nos castigaba tanto. Quedaban unos 170 kmts para Zafra por una carretera plagada de toboganes y en la que la unica distracción eran los relevos que seguiamos haciendo y la pesadez de ir descontando, kilometro a kilometro, lo que nos faltaba (Badajoz 225 kmts.) Pedro comenta: Que ganas tengo de que se cambien el dos por uno.Seguimos con la monotonía y marcandonos metas cortas para hidratarnos. (Badajoz 175 kmts.) Nuevamente Pedro: Que ganas de ver los dos digitos. Por fín Zafra, refrigerio y camino de Santa Olalla de Cala, pero antes cena en Fuente de Cantos, coincidiendo con la anochecida.
La noche se presentaba muy guapa. Temperatura agradable. La luna nos empezaba a saludar con todo su esplendor, aro enorme y anaranjado que emergia en el horizonte abriendose paso hasta colocarse exactamente sobre nuestra vertical, alumbrandonos con su manto y
recordandonos continuamente que no estabamos solos, que ella nos iba a acompañar y proteger durante toda la travesía nocturna.Pedro era el que mas conocía la ruta, por haberla realizado con anterioridad y nos habia anticipado que hasta Santa Olalla primaba lo favorable (Nos pudimos dar cuenta de la dureza del 300 y el 400 de Sevilla, que se realiza por este recorrido pero a la inversa). Cartel de Sevilla 125 kmts y TODO BAJADA. Pero no, esa no era nuestra ruta, nosotros en Santa Olalla (Kmt 400) debiamos girar a la derecha en dirección Zufre, Rio Tinto, Zalamea la Real. Tramo de 61 kmts. que, según Pedro, tenía dos subiditas fuertes y el resto llaneando.
¡ Vaya encerrona! Subidas y mas subidas con tramos de hasta el 12% y 13%, según el altimetro de Castor. Los puntos kilometricos no se movian. En un tramo de 7 kmts tardamos casi una hora. Como siempre ibamos picando hacia arriba logicamente nuestro punto de referencia eran las estrellas y nuestra generosa compañera, la luna, y, estando en estas, observamos los faros de un coche…yo diría que en cielo. La pregunta era obligada: Pedro, ¿ Hasta allí tenemos que subir?, Respuesta lacónica: Si.
A esta alturas todos nuestros pensamientos coincidieron en dar un “cariñoso” recuerdo a nuestro querido Forever: Estimado amigo y te lo digo con todo el cariño que sabes que te tengo: ¿Qué necesidad había de poner este tramo de 61 kmts en un brevet de 600?, ¡sobretodo cuando ya llevabamos 400 kmts en las piernas!.
Fue este un tramo de 61 kmts., bajo mi punto de vista, totalmente innecesario en un recorrido de 600 kmts.. Nos dejó los cuerpos realmente castigados
A la cabeza se me vinieron todos estos organizadores de brevets, que las programan con una dureza impropia de este tipo de marchas (quiero recordar en este punto lo que me enseñaron aquellos pioneros del cicloturismo en España y que realmente fue lo que me “enganchó” a este mundillo: “Las brevets consisten en hacer kilometros y kilometros, si es posible con un buen grupo de amigos, aprovechando para conocer regiones, pueblos y pobladores y a la vez practicar tu deporte favorito”)..
Retomando el relato, llegamos a Trigueros amaneciendo, ayudamos al empleado de la gasolinera donde teniamos que sellar a abrirla y nos pusimos a degustar lo poco que nos ofrecía: vaso de chocolate o café con galletitas del principe de bekelar. Cuando nos quitamos las gafas y los cascos, el espectaculo fue desastroso: Miradas perdidas mientras degustabamos los manjares, ojos hundidos, caras de pocos amigos….etc. ¡ Y pensar que 100 kmts antes estabamos de p…madre!. ¡Dichoso e inesperado tramo!.
Nos pusimos nuevamente en camino, ya solo faltaban unos 90 kmts., pero eso sí con el aire en contra nuevamente. El sol con su calorcito, la proximidad a meta, el bocadillo en La palma del Condado, nos fueron devolviendo el buen animo y finalmente concluir con éxito la prueba.
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